El Bálsamo de Dios.

Cómo vencer los pensamientos que destruyen,  opacan nuestra mente, y nuestra vida espiritual. Este tema lo preparé basado en mi experiencia personal con Dios, y en las batallas que enfrentamos a diario como hijos de Dios. Hoy les hablare sobre esos pensamientos, o como lo identifica la palabra de Dios: Los dardos incendiarios del maligno (Efesios 6,16).

En mi vida he experimentado momentos maravillosos, pero también momentos en el que le  he dicho: Señor, me rindo, no se como sacar este pensamiento de mi interior(mente). Y el Señor, me ha contestado con la misma palabra que le dijo a Pablo:

Te basta mi gracia (1 Corintios 12, 7-9).

Si usted, le esta sucediendo lo mismo: No se rinda Jamás! La Biblia dice que la palabra es un bálsamo (Jeremías 8, 22). En Proverbios 4, 20-22...Hijo mío, atiende a mis palabras, escucha mis consejos: que no se aparten de tus ojos, porque son vida para el que los sigue, son salud para su cuerpo. Se ha preguntado alguna vez: ¿por qué será que cuando una persona recibe un golpe lo primero que la abuelita, mamá y doctores recomienda es poner bálsamo? el bálsamo es un medicamento compuesto de sustancias aromáticas que penetra la piel y se puede sentir el calor inmediatamente. El perfume o la fragancia del bálsamo son tan fuertes que se puede respirar, y se puede usar para descongestionar las vías respiratorias. Pues, la palabra de Dios es más fuerte que el bálsamo.

En Hebreos 4, 12...nos dice: Que la palabra de Dios es viva y eficaz, más penetrante que espada de doble filo. Que deseo que entendamos: Que la palabra de Dios puede entrar a esa área que desconocemos de nosotros mismo, y penetrar a lo mas intimo de nuestro interior y nos enseña a someter todo pensamiento que tendrá que rendirse a nosotros y someterse a Cristo( 2 Corintios 10, 5). Ya que es la palabra de Dios, es como el bálsamo que descongestiona cualquier cosa que este turbando nuestra mente. Cada promesa de Dios debe ser el bálsamo para sanar nuestros golpes de la vida.

Comparto cómo he combatido estos pensamientos en mi vida. Estoy bien segura, que si Dios lo hizo para mí, también lo hará por cada uno de ustedes. Cada uno de nosotros vamos hacer tentados en diferentes áreas de nuestras vidas. Y donde primero llega la tentación es a la mente. Hay pensamientos que llegan a la mente, que son tan fuerte, que cuesta que se vayan. Hay algo muy importante, No podemos caer en la trampa porque oro a diario, no puedo tener pensamientos opuesto. La oración es sumamente importante para vivir llenos de fragancia de Dios, es el arma, poderosa que tenemos los cristianos. Lo importante es, no entrar en condenación. Si no, ir frente a Dios y depositar esos pensamientos para que el Espíritu Santo con el fuego de su amor queme de raíz todo pensamiento que nos este molestando, atormentando.

Hay que tratar por todo los medios de no afligirnos. Y saber que el momento que fuimos a Dios y se lo presentamos en oración, ya El, Espíritu Santo, esta trabajando en ello, en nuestro interior, El es nuestro maestro. Cual es mi arma diaria, la oración intercesora, la lectura del día, y el regalo ir a misa a diario.

Pero hay que ser perseverante en nuestra vida de oración. Que significado tiene la palabra: perseverante, para un hijo de Dios. Que hay que tener constancia en la petición como la viuda, que insistió hasta que le arrebato la petición al juez. No es si tengo deseo o tiempo, la falta de perseverancia afecta la vida espiritual de muchos cristianos, no son constantes. Cuando un hijo de Dios esta llamado a seguir sembrando para dar frutos, en abundancia, hay que estar dispuesto a perseverar en la oración diaria. Ya que cuando la palabra de Dios es escuchada, meditada, crece la fe, y penetra en nuestro interior, se hace fragancia dentro de nuestro corazón y nos da la victoria.

Hay miles de cristianos que están bajo la lluvia de bendiciones de Dios, pero por no ser perseverante las lluvias de Dios pasan por encima de ellos, y ni se mojan. Porque sacan la sombrilla, que se llama, no soy constante. La perseverancia tiene que ser para el cristiano, una lluvia, que lo empapa por dentro y por fuera. En Romanos 12, 2...nos dice: Transfórmense a partir de una renovación interior. En otras palabras, al cambiar nuestra manera de pensar, cambia nuestra mente, cambia nuestra vida.

En Santiago 1, 6-8...nos dice: Porque el que vacila se parece a las olas del mar. En otras palabras, que el que hoy piensa una cosa y mañana otra, no es constante. Cuando vivo una vida de oración constante, me mantengo en comunión con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, esto produce una seguridad en mi, que no me deja rendirme. Y cuando paso días sin orar, eso hace que me rinda fácilmente.

Que hace la oración diaria para mi? La respuesta esta en Efesios 6, 10-13 y 18...

Finalmente, dejen que el gran poder de Cristo les de las fuerzas necesarias. Protéjanse con la armadura que Dios les a dado, y así podrán resistir los ataques del diablo. Por lo tanto, protéjanse con la armadura completa! Así, cuando llegue el día malo, podrán resistir los ataques del enemigo. Vivan orando y suplicando. Oren en todo tiempo según les inspire el Espíritu. Velen en común y perseveren en sus oraciones sin desanimarse nunca.

Que nos enseña esta lectura, que con la oración me fortalezco y con la palabra de Dios combato, defiendo, mis pensamientos. Por supuesto que los pensamientos pueden variar. Pero el método para combatirlo es el mismo. Van a llegar pensamientos, para desanimarte. Que creas, que son tan pecaminosos que jamás entraras al camino de santidad. Llegaran pensamientos para que desconfíes de la fidelidad de Dios. Llegaran pensamientos de duda. No importa con que tipo de pensamientos tratemos. Lo que debemos de recordarle al enemigo es: Que Dios es fiel y en su momento, él nos dará, la victoria sobre esos pensamientos.

Y por último: Tome usted cualquier bálsamo y por muy pequeña que sea la porción, el aroma penetra. No solo al interior de la piel, si no a toda la atmosfera. Eso es lo que hace la oración en la mente de un cristiano, cuando hacemos prisionero a todo razonamiento, sometiéndolo a Cristo...

Con el amor del Padre, del Hijo y el Espíritu Santo y la intercesión de la Virgen María y al cuidado de José, nada jamás será imposible. Amén.

María Sosa (Ministerio Mujer Levántate)