¡Hola, hermana en Cristo!
Bendito sea el Señor, su gracia hizo maravillas para mí:
mi corazón es como una ciudad fuerte. (Salmo 31, 22).
Usted me comparte que leyó el mensaje: Atrévanse a ir contra la corriente. Atrévanse a ser feliz. El título de ese mensaje es: ¿Que necesito para alcanzar la felicidad?
Definición de la palabra: Atreverse: Determinarse a
hacer o decir algo que implica riesgo: Insolentarse, perder el respeto debido:
¿Cómo te atreves a marcharte sin mi permiso?
Como explicó en ese mensaje el mundo busca la felicidad en
lugares equivocados. Cuando escribí al final del mensaje esas palabras es
porque sé que se puede llegar a la felicidad a encontrar ese aroma a victoria
por medio de la gracia de Dios. Pero hay que refugiarse en el corazón de Dios.
El pecado que habitaba en usted es porque usted abandonó la casa de su Padre.
Cuando un padre le advierte a un hijo: ¿Cómo te atreves a
marcharte sin mi permiso? La mayoría de las veces es porque el hijo se fue y no
supo dónde estaba, fue el miedo que lo hizo sentir y decir este tipo de frases.
Ahora Dios no usa este tipo de frases para parar nuestras determinaciones. ¿Por
qué? Dios conoce el corazón de sus hijos y lo que maquinan en su interior.
El Hijo Pródigo. (Lucas 15, 11-32). Una de las parábolas
más conocidas de Jesús aparece una sola vez en el Evangelio de Lucas.
Los fariseos y maestros de la ley no entendían por qué Jesús
dedicaba tiempo a personas que no tenían buena reputación. Jesús le contesta
con esta parábola que tienen como tema recuperar algo perdido: una oveja, una
moneda o un hijo. Jesús quiere dejar claro que, para él, para Dios, todos somos
valiosos. Jesús también habla sobre la importancia del arrepentimiento y el
gozo que esto trae al corazón de Dios. (Lucas 15, 7 y 10).
La petición del hijo menor se mira que es como una ofensa al
padre, quería disfrutar la vida, prefería que le adelantaran su herencia para
poder irse y comenzar a vivir a su manera. El padre accedió y repartió la
herencia y el hijo menor se fue a un país lejano a malgastar el dinero en
placeres desenfrenados. Pero al final se queda sin nada porque el país donde
vivía tenía problemas económicos y sólo había trabajo de cuidado de cerdos, un
animal impuro para los judíos. El hecho de que él aceptara ese trabajo nos
revela su nivel de desesperación.
Él sabía que la ofensa contra su Padre había sido enorme,
sin embargo, el amor de su Padre era muy grande. El mismo padre que lo dejó ir,
le recibió sin cuestionamiento. El Padre expresa su amor y aceptación tal como
estaba. Así de fuerte es el gozo que hay en el cielo cuando venimos ante Dios
arrepentidos. Hay fiesta en el cielo cada vez que un pecador se arrepiente.
Jesús anuló el comprobante de esa deuda en la cruz.(Colosenses 2, 14).
Todo volvió a ser alegría, felicidad en aquella casa. El
gozo en el cielo es el mismo cuando un pecador vuelve. Lo que el Señor desea no
es la condenación del pecador. Si, te han dicho, que Dios te espera con un
látigo, si te vuelves a él, ¿por favor escucha esto? Dios te está esperando,
así como el Padre del hijo pródigo, te espera y corre a abrazarte, a besarte y
empieza una gran celebración en el cielo por tu regreso.
Este hijo hizo daño, claro que lo hizo. Pero, Dios conocía a
su hijo y aunque se fue y gastó sus dones y talentos en otro mundo perverso no
desprecio a su hijo. El como creador él sabe que ADN, ha puesto en cada uno de
nosotros. Y aunque el mundo no entienda con su sicología o intelecto humano
Dios se burla del sabelotodo y busca con desvelo a ese pecador que se ha ido de
su casa y espera su regreso.
Es muy cierto que como usted me dice navego contra la
corriente pensando que regresaría un día a su hogar con un futuro mejor para
sus hijos. Pero que a sus espaldas su esposo sembró odio a sus hijos contra
usted. Recuerde en la parábola el hijo mayor no entendió a su padre se enojó.
Esta es la forma que veo esta parábola: el hijo mayor en la
carne, el hijo menor en el espíritu. (Gálatas 5). ¿Qué decisión es esta que le
estas dando una fiesta? El hermano mayor estaba confundido, y su Padre le explica,
pero no entendía el amor y la gracia de su Padre. ¿Qué nos enseña? Un hijo
lleno de conocimiento sobre su Padre jamás reclama, se alegra porque conoce que
clase de Padre tiene. El hijo mayor, aunque quedó cerca del Padre, no conocía a
su Padre, y el otro que se había ido conocía el corazón del Padre, reflexiono a
solas de la bondad de su Padre, ese hijo estoy segura de que recordaba lo bueno
y lo dulce que era su Padre a pesar de estar viviendo una vida desordenada.
Entonces el hijo se atrevió a hacer algo que implicó
riesgos. ¿Por qué? los recuerdo que la tenia de su Padre, eran de un padre
excelente. Usted siga sembrando amor y cariño en sus hijos. Y ellos han
entendido que el techo y los buenos colegios que han ido, fueron pagados por
usted. No trate de explicarle a su esposo, recuerde el hijo mayor no se tomó su
tiempo en conocer al padre. Y es por eso por lo que ahora siente celos de sus
hijos, no los conoce. Y eso hace que él sienta inseguridades, porque ellos se
sienten a gusto con usted.
Mi consejo es siga usted creciendo junto a su Padre
Celestial sea un testimonio vivo para sus hijos. Y con su esposo un día entenderá
que Dios ha sido más que bondadoso con él. Sea valiente y no tema que usted
saldrá victoriosa y lo más hermoso que usted reconoció sus pecados frente a
Dios.
Su felicidad ahora no está basada en otro ser humano está
basada en un corazón de acuerdo con los planes de Dios. Y como dice el
salmista: Su corazón es como una ciudad fuerte.
Ma. Sosa (Ministerio Mujer Levántate).
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